REJAS
Puede el pajarillo estar en su jaula de oro
entre tapices de rosas su madrugador trinar;
Puede una melodía triste adornar su tesoro
y, un nombre lejano mi despertar.
Puede el grillo en la noche cantar con desgarro
y, desafiar a las estrellas desde la oscuridad;
Puede una orquesta seguir musiqueando
un nombre lejano en mi soledad.
Puede un muerto estar en silencio en su encierro
y, seguir aguardando su turno hacia la eternidad;
Puede el cántico de la esperanza pasar de largo
y, un nombre lejano que jamás se detendrá.
Puede ser verdad y luego no ser cierto
que, un corazón se empañe como el cristal;
Puede una puerta cerrarse con un soplo de viento
de un nombre lejano que no la abrirá.
Puede el pajarillo estar entre rejas de oro
sumido en la penumbre de sus largas horas;
Puedo yo imitar a otros poetas en su destierro
y, a un nombre lejano desde las sombras.
Puedo imitar una fatigada canción
y, caer prisionero en las rejas de lo incierto;
Puedo seguir llamando a las puertas de su corazón...
¡entre nubes de rotas elejías mi descontento!
Gaspar González Pina/escritor