Entrega de la Medalla |
El presidente
de la UNEE resaltó en Valencia la necesidad de premiar a este colectivo con la Medalla de San Isidoro
El presidente de la Unión Nacional de Escritores de
España (UNEE), Juan Carlos Heredia,
entregó el miércoles 25 de junio en Valencia la Medalla de San Isidoro de
Sevilla al Movimiento de Escritores Pro Derechos Humanos del Ateneo Blasco Ibáñez,
ante representantes de la cultura en esa comunidad autónoma que abarrotaron el
aforo del Ámbito Cultural de El Corte Inglés.
Junto
a Heredia y la presidenta y fundadora del Movimiento galardonado, Isabel Oliver, en la mesa estuvo la
delegada regional en Valencia de la UNEE, María
Auxiliadora Fonellosa, quien presentó a los participantes y agradeció el
desplazamiento del presidente nacional.
Con
anterioridad a la entrega de la Medalla Juan Carlos Heredia elogió la
trayectoria del Movimiento de Escritores Pro Derechos Humanos y resaltó los
motivos que habían llevado a la concesión de esta distinción honorífica, máxima
condecoración de la Unión Nacional de Escritores. “Es necesario, como hoy se
hace con el Movimiento de Escritores pro Derechos Humanos, reconocer a las
entidades que más puedan aportar opiniones y crear un espíritu crítico, en un
momento como el presente caracterizado en muchos casos por la carencia de ideas
y el desinterés colectivo”, dijo.
“Acercamiento y sinergia”
El
máximo responsable nacional de la UNEE recordó que había propuesto la concesión
de la Medalla de San Isidoro a este Movimiento porque, de esa manera, la
organización cultural que preside expresaba su “acercamiento y sinergia hacia
colectivos con los que compartimos muchas aspiraciones”.
Heredia
destacó que la entidad que preside es una organización consolidada que cuenta
en la actualidad con delegaciones en varias comunidades autónomas, entre ellas
precisamente Valencia, donde existe un grupo destacado de escritores y se
promueven distintas actividades, la última de ellas la presentación de la
antología “Poemas por la Interculturalidad”. “Esta antología fue una clara
apuesta por la convivencia de culturas y la diversidad, que nos acerca, en
cuanto a objetivos, a plataformas como el Movimiento de Escritores Pro Derechos
Humanos”, resaltó.
Pronunciamiento de los escritores
Por
su parte, y tras recibir la Medalla entre aplausos, Isabel Oliver recordó que el
Movimiento Escritores pro Derechos Humanos había nacido para posibilitar a todo
escritor que lo desee “que se pronuncie,
que aporte su pequeño grano de arena para dibujar mediante la opinión que le merezcan
los distintos problemas un cuadro de empatía y convertir una parte de su
trabajo en la voz de la ciudadanía de las gentes del mundo”.
Así,
insistió en la necesidad de que los escritores aborden temas de especial
relevancia como la violencia de género, la corrupción, la elevada tasa de
pobreza infantil en España o los ajustes económicos “que están ahogando la
frágil economía de subsistencia en que está inmersa la clase trabajadora de la
Unión Europea”, porque, como enfatizó, aunque las organizaciones no
gubernamentales desarrollan una importante labor social los intelectuales deben
también implicarse. “Yo echo de menos el apoyo moral de la palabra”, manifestó.
Oliver destacó a diferentes personajes históricos de la historia española de los siglos
XIX y XX que habían sido políticos y escritores comprometidos, y consideró que
en la actualidad “hay una cultura viva de compromiso social de los escritores
en España, que desde la llegada de la Democracia, se ha quedado en estado
latente. Sin embargo-agregó- no es verdad que ya no sea necesaria la
concurrencia del escritor para coadyuvar a la defensa de los intereses de los
ciudadanos y para ser vehículo de expresión de sus quejas y alegrías”.
En
ese contexto dijo que el Movimiento de Escritores pro Derechos Humanos,
fundado en 2008, ha venido organizando conferencias y este año celebrará su
segundo congreso, preparando ya un libro con muchas de esas conferencias
pronunciadas, una obra que estará en las bibliotecas de la Generalitat
Valenciana.
Al
discurso de Oliver prosiguió un turno de intervenciones de apoyo al Movimiento
galardonado, en el que participaron Eva
Barrés, Neus Tomás Gómez, Charles (José Carlos Llorens), Hasbia Mohamed, Montserrat Temple Aroza, Vicente
Enguídanos Garrido, Maribel Sansano
y Carmen Carrasco Ramos, esta última
miembro de honor de la UNEE. Las intervenciones se cerraron con María
Auxiliadora Fonellosa, como delegada regional, y la propia homenajeada, quien
recitó un poema de su autoría sobre la inmigración.
El
acto solemne finalizó con la interpretación de varias obras clásicas por parte
del Cuarteto Musical de la Banda Sinfónica de Alboraya.