Poema de Emilio Sánchez











¿Qué soy viejo? ¡Lo sé!

Lo dice el calendario cruel,

Pero lo que no dice, niña,

es que tengo el corazón tan grande

que lo pongo a tus pies.


Niña de los pechos duros

Y los sentimientos tiernos,

Acepta mis pobres requiebros

y déjame que bese con fervor

cada pliegue de tu cuerpo.


Niña, se compasiva con él

y dale una limosnita de amor

que por culpa de otra mujer

se le ha partido el corazón.


Con él se compasiva, niña

Y sigue dándole limosnita

Veras como poco a poco

la angustia toda se le quita.


Niña, sigue siendo compasiva

Y reparte de amor más limosnita

Que no tengo roto el corazón;

me estoy muriendo de envidia.


Emilio Sánchez