Es un producto bancario realmente atractivo: Una tarjeta de crédito llamada "Única" de la que puedes sacar tanto como desees y sólo te cobran una parte. El resto se va acumulando en el concepto de deuda. Y así fue como yo he llegado a tener una deuda de 2.700 euros al día de hoy.
Es el "carpe diem" el que te echa a perder pues vas gastando y satisfaciendo tus necesidades puntuales sin tener que pagar al momento.
Esperaré a la paga extra de verano, momento en el cual me desharé -tras pagar las deudas- de esa jugosa tarjeta.
Y dándole las gracias al banco por atender mi "carpe diem" prescindiré de ese jugoso bocato de cardinali.