El libro del profesor y escritor fue presentado en la capital murciana por la Delegación Sureste
El pasado 27 de septiembre, en la sala Ámbito Cultural de El Corte Inglés de la ciudad de Murcia, tuvo lugar la presentación del libro “Sonetos imperfectos”, del profesor, escritor y miembro de la UNEE Tomás Guillén, dentro de la programación prevista por la Delegación Sureste de la Unión Nacional de Escritores de España.
Dio comienzo el acto con las palabras de bienvenida del delegado territorial de la UNEE, Juan A. Pellicer, quien quiso agradecer en primer lugar a los responsables del espacio Ámbito Cultural en la figura de su responsable David Castro su continua colaboración con el colectivo de escritores; así mismo quiso agradecer al público que llenaba la sala su asistencia a este nuevo acto de la Delegación.
A continuación se dio paso a Juan Cano Conesa, prologuista de la obra, quien, a propuesta del autor, fue el encargado de presentarla.
Comenzó haciendo alusión a que “la mejor palabra de un texto, de una obra, la debe tener la misma obra”, trazando a continuación un breve y personal comentario en relación con la persona y trayectoria del autor, y destacando que “Tomás es una persona de vida y literatura plena, viviendo con asombro, con curiosidad, con ganas de saber”.
Destacó del autor que “hace poesía con todos acontecimientos de su vida”, considerándolo un “poeta muy vitalista”; y enfatizó además que “los sonetos de Guillén tienen el silencio como límite”.
Durante su intervención recitó Cano Conesa unos versos del poeta cubano José Ángel Blesa estableciendo un paralelismo con la forma de vivir del autor, subrayando que la obra del autor es rica por desplazamientos, metáforas, etc.
Durante su intervención calificó al autor de “trovador de sueños perdidos”, haciendo un homenaje a Miguel Hernández, a Lope de Vega y a Quevedo, y señalando que el último de los poemas contenidos en la obra puede resumir la vida del autor.
A continuación tomó la palabra el delegado territorial para, tras leer una breve reseña del autor, cederle el turno de palabra.
Tras el agradecimiento por parte de Guillén tanto al público como al delegado, y reconociéndose algo nervioso comenzó recitando algunos de los sonetos incluidos en la obra al tiempo que llevaba a cabo consideraciones/reflexiones respecto de sus títulos y sus motivaciones.
Después del pequeño recital se dio paso a un animado y distendido coloquio entre el numeroso público y el autor.
A continuación y tras la finalización de la intervención del autor, dio comienzo un animado y participativo coloquio, siendo con las palabras de despedida por parte del Delegado y las fotografías para el recuerdo las que clausuraron el evento.