“Los hombres de la luz”, obra literaria de un autor “creativo e imaginativo”

José Blas Hernández Ros presentó su libro en un nuevo acto en Cartagena de la Delegación Sureste

El pasado 26 de enero tuvo lugar en la Cafetería “El Soldadito de Plomo” de la ciudad de Cartagena un nuevo acto organizado por la Delegación Sureste de la Unión Nacional de Escritores de España, cual fue la presentación del libro “Los Hombres de la Luz”, del miembro de la UNEE José Blas Hernández Ros.

El acto comenzó con las palabras de salutación y bienvenida del delegado regional, Juan A. Pellicer, quien, como viene siendo habitual, tras reiterar su agradecimiento al público asistente así como a los propietarios de la cafetería “El Soldadito de Plomo” por la favorable acogida dispensada hacia los actos de la Delegación pasó a detallar el desarrollo del acto, el cual comenzó con la presentación y entrega de carnet al nuevo asociado Diego Quevedo, para lo cual Pellicer leyó una reseña de la brillante biografía de este militar y estudioso de la vida y obra de uno de nuestros más insignes personajes: Isaac Peral.

Tras su presentación y un breve turno de intervención tomó la palabra Quevedo reconociendo sentirse honrado por formar parte de la Unión de Escritores.

A continuación fue presentado  por parte del delegado Manuel de San Juan (Manuel Cañavate) escritor y miembro de la UNEE, propuesto por el autor para la presentación de su obra, quien tras agradecer tanto al público como al autor así como al delegado su propuesta, comenzó su intervención hablando de la inteligencia y poder de concentración que a su modo de entender concurrían en el autor de la obra. “José Blas es creativo e imaginativo, es capaz de abstraerse de las distracciones de la vida corriente y apuntar en una dirección y seguir su camino. Camino que durante toda su vida se ha trazado y que sigue y persigue hasta conseguir su objetivo, siendo por eso que admiro a este tipo de personas, ejemplos de tenacidad, constancia y fuerza interior”, dijo Cañavate.

El presentador del libro hizo un recorrido por la infancia y juventud del autor, hasta situarlo en la actualidad viviendo las “pasiones” que más le entusiasman, “la primera y por encima de todo su familia, su mujer Raquel y su hijo pequeño Alejandro. El dibujo, la segunda de sus pasiones y dentro de él el retrato. El coleccionismo de fotos y postales antiguas. Y el cine, donde también ha dirigido varios cortos abordando diversas temáticas”.

Hizo el presentador un comentario a su anterior obra “Un cabo suelto” para situarse en esta “Los hombres de la luz”, donde lo primero que resalta es lo agradable para la vista de su cubierta.

Continuó su explicación detallando que la obra se encuentra compuesta de un prólogo obra de Lito Campillo (su cuñado); una introducción, doce capítulos y un epílogo. Destacó para el lector la lectura ágil y cómoda de la obra, y coincidió con el propio autor en que es un libro imaginativo al que invitó a los lectores a sumergirse y disfrutar con su lectura, al afirmar estar seguro de que “les enganchará”.

A continuación tomó la palabra Pellicer para de manera breve hablar de la magia de los libros y sus autores, “… capaces de crearnos y trasladarnos a universos tan atractivos como inexplicables, ahí su magia y su encanto”.  

Posteriormente fue presentado el autor, quien comenzó su intervención agradeciendo a todos su asistencia, reconociendo seguidamente que su intención a la hora de plantearse este su segundo libro, “no fue otra que la de mezclar/unir el paisaje de su niñez y su trama. Unos paisajes donde jugaba con mis amigos”. Reconociendo a continuación que una parte importante de su obra es fantasía/ficción.

A lo largo de su intervención Hernández Ros fue explicando algunos detalles de la trama. Es un libro de lectura juvenil –comentó- que le llevó poco más de un año de trabajo.

Tras la intervención del autor y como viene siendo habitual en este tipo de actos, se abrió un pequeño e interesante coloquio donde el público pudo formular las preguntas al autor quien gustoso se ofreció al dialogo, siendo clausurado el evento con las palabras del delegado quién informó e invitó a los presentes al próximo de los actos organizados.