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| Poetas participantes |
La
Delegación en Sevilla celebró una velada en recuerdo de los más
insignes poetas de la comunidad
“La Caja Habitada” de Sevilla sirvió de
encuentro el pasado 21 de febrero para una tarde de música y tertulia impulsada
por la Delegación en Sevilla, Huelva, Cádiz y Gibraltar de la UNEE, en la que
escritores asociados recordaron a grandes poetas andaluces, hablando de su
vida, contando curiosas anécdotas y leyendo sus obras más célebres.
Nuria
González Carrillo recordó a Fernando
Quiñones, gran escritor de la provincia de Cádiz con quien había mantenido
una amistad personal; Mabel Zaves a Carlos Edmundo de Ory y a Rafael de Cózar, amigos entre sí y
profesores de ella.
Anabel
Caride a Luis García Montero,
desde siempre “enamorada” de la poesía de este gran escritor granadino por sus
poemas dedicados a las ciudades y temas sociales de actualidad.
Juan
Palacios Clemente a Manuel Rubiales,
gaditano afincado en Trigueros que con su pluma “defiende temas de actualidad y
de política”. Además, Palacios Clemente ha sido el autor del prólogo del último
poemario de este escritor.
Concha
Gorostiza Dapena recordó a Pilar
Paz Pasamar, homenajeando a esta gran escritora jerezana de la que Juan Ramón
Jiménez ya habló cuando tan sólo contaba con 18 años.
Francisco
Espada Villarrubia habló de su propia vida y obra destacando que “la poesía,
como tinta oral, vino a ocupar la Caja,
misteriosamente deshabitada, con el duende que la palabra tiene al ser
pronunciada y hacerse luz… hacerse vida”.
Y María
Sánchez, delegada provincial de la UNEE, a Domingo
F. Failde, de quien en estos días se cumple
un año de su fallecimiento y con el que compartió “bonitas tardes de
tertulias”.
La velada contó en el apartado musical con la participación de Ariadna Sonidos del Universo, cuya actuación puso la nota final a tan agradable tarde, donde también se echaron de menos a otros escritores y amigos que por estar enfermos no pudieron estar presentes.
La velada contó en el apartado musical con la participación de Ariadna Sonidos del Universo, cuya actuación puso la nota final a tan agradable tarde, donde también se echaron de menos a otros escritores y amigos que por estar enfermos no pudieron estar presentes.