No existo


Poema de Enrique Sánchez Campos
         
A veces, siento en mí un vacío inmenso,
una amargura que me envuelve y anula;
un sin vivir que me corta el aliento,
y no sé qué me pasa por el pensamiento,
que un fuego atroz quema mi alma y la estimula
a lanzarse al vacío que llevo en mi interior,
y desaparecer con todo ese dolor
que ya no afecta en modo alguno a mis sentidos.

A veces, siento que soy un animal herido,
una alimaña o fiera rabiosa;
un arbusto, un trozo de roca u otra cosa,
un sinfín de bagatelas y extravíos.

Miles de piezas que no están ensambladas;
madejas de Ariadna con hilos retorcidos
de extremos rebelados y bravíos,
que no tienen principio o fin,
que están vacías, faltas de contenido.

A veces siento que todo está perdido,
que nada existe y yo estoy acabado;
que no hay presente, futuro, ni pasado,
que todo es fruto de un caos organizado
subyacente en el sueño de algún muerto viviente,
o acaso la obra de algún creador tarado
que a la casualidad fió un caos omnipotente,
de algún proyecto que quiso ser amor.

A veces siento que ya no siento nada,
que la vida quedó en una idea frustrada;
que el hombre marginó, con torpe intento,
la libertad de un ser supremo
y terminó esclavo de su propia locura;
esclavo, al fin, de su propia andadura.