Escritores participantes |
La Real Sociedad de
Agricultura acogió un acto organizado con el respaldo de numerosos escritores
valencianos
El acto contó que con la asistencia de un numeroso público y destacados
representantes de la cultura como Ubaldo G. Visier, poeta, escritor y
dramaturgo, Isabel Oliver, presidenta del Ateneo Blasco Ibáñez de
Valencia, y Eva Barrés, presidenta de la Asociación de la
Asociación Emprendedores de las Artes y las letras (AEDAL).
Abrió el acto el delegado de Agricultura, José F.
Ballester-Olmos y Anguís, quien con sus palabras animó a la
Delegación y a su responsable, María Auxiliadora Fonellosa Causada, a
comenzar una nueva andadura con ilusión y llena de proyectos culturales
teniendo a la Literatura como objetivo.
Fonellosa se presento a sí misma y presentó la Unión como una asociación que
cuenta en la actualidad con más de quinientos miembros, entre los que destacan
escritores como Antonio Gala y Fernando Arrabal. Además, resaltó también la
participación activa de los asociados de distintas partes de España, ya que la
asociación permite la colaboración en diversas antologías, entregando
anualmente la Medalla de San Isidoro para premiar el trabajo realizado durante
el año por escritores e instituciones culturales. Como final se leyó un
mensaje de apoyo a la nueva Delegación del presidente nacional de la Unión de
Escritores, Juan Carlos Heredia, y a continuación se pasó a la entrega
de carnets a los nuevos socios.
En la segunda parte se dio paso a la presentación del libro “El Reflejo
del Espejo”, de María Auxiliadora Fonellosa, por parte de Eva Barrés, Carmen
Carrasco, autora del prólogo y Vicente Enguídanos Garrido, mantenedor del acto
e ilustrador del libro. Luego se recitaron unos poemas del mismo a cargo
de los rapsodas Antonio Prima, poeta y escritor. Le siguieron Isabel
Oliver, Carmen Carrasco, Maribel Sansano, Pilar Bellés,
María Auxiliadora Fonellosa, Vicente Enguídanos Garrido y Montse
Temple Aroza, todos ellos, a excepción de Antonio Prima,
miembros de la Unión.
El acto estuvo amenizado por Santiago Huguet, quien interpretó a
la guitarra distintas piezas musicales y acompañó a los rapsodas durante todo
el recital.