Ventana Literaria: Eric Chaet











Asoma hoy a esta sección un eminente escritor estadounidense nacido en Chicago, que significa "poderoso o grande", según los grandes jefes de las tribus indias que poblaron la región. O con el apelativo de "excepcional", debido a su pródiga vida cultural: ópera, orquestas, jazz, teatro, danza, arte y arquitectura. De esta notable ciudad es Eric Chaet.

Irónicamente, Eric Chaet alude a este emporio como "un barrio peligroso donde las escuelas parecen cárceles", en alusión, presumiblemente, al afán de superación individualizado de los lugareños y con una enseñanza estricta. Trabajó en fábricas, almacenes y oficinas para dedicarse, a posteriori, a la docencia, impartiendo clases de Literatura y Filosofía. Fue un ferviente activista contra la discriminación racial que se auspició en las universidades y en la vida política y criticó duramente la actuación norteamericana en la guerra de Indochina, en los años 1960 y 1970. Su experiencia como viajero de autostop le llevó a conocer todo el país y la vida difícil que ello conlleva, "donde se duerme y se come poco y se sustenta con empleos breves...".

Eric Chaet es un prolífico escritor y su obra se basa en experiencias vivificantes por aquellos lugares por donde anduvo. Cabe destacar "Viejo buitre de la tierra de nadie" (poemario), "Cómo cambiar el mundo para siempre y para bien" (ensayo) y "Gente que conocí haciendo autostop en las carreteras de Estados Unidos", donde combina poesía y prosa. Como cantante posee dos discos titulados "Sólida y firme" y "Canta", donde hizo pósteres serigrafiados en tela, distribuyéndolos por los cinco continentes.

Finalizo esta exposición sobre este interesante artista con su poema "Al igual que los animales". Dice: "Hay personas que viven como ratones y conejos, / pasando la mayor parte de su tiempo / organizándose y durmiendo en cuevas, / ocultos de la superficie por sus peligros. / Me parezco, a veces a ellos. / Y hay personas que viven como predadores, / deambulando como los tiburones, los leones, los tigres, las águilas, los halcones o cocodrilos, / compitiendo entre sí y gastando su energía / en el ahorro, las inversiones, las pensiones... / queriendo comer a alguien o morir. / Y a estos también me parezco en ocasiones. / Hay personas, también, que viven como animales domésticos: / cerdos, pollos, perros de trineo... / fieles a sus costumbres cotidianas: / jefes de equipo o dueños de espacios donde nada es invariable. / De ellos también he aprendido para vivir en sociedad. / También, dominantes y dominados...".

Artículo de Graciliano Martín Fumero

Publicado en El Día, de Tenerife