Poema de Miguel Angel Matamala










Sueños de emigrante


En mi ausencia veo mermar la flor,
veo el viento descomponer la hoja,
veo tu rostro enjugar mis manos
con lágrimas del olvido.

Me alejo de ti, sin borrar tu recuerdo,
sin borrar la pasión que al alba suena,
sin borrar los gestos de amor
que a mi alma llegan.

Sueño con cimentar la más fiel lanzadera
a un retorno a tu mirada.

Sueño con un beso bajo un olivo
donde unja nuestra sangre la extensión del olivar.

Sueño como taponar esta herida, de mi ausencia,
sin deshilvanar el tiempo de mi voz
cuando retumba en tus oídos.

Sueño que mi corazón manso y rudo
no alcanza safarse del lazo,
de esta nueva ciudad,
donde amanece mi desconsuelo desnudo.

Sueño que mi corazón manso y rudo,
desde esta soledad en la noche sonora,
quiere dar la vuelta al tiempo
y respirar en tus brazos el vaho de tu aliento

Sueño que mi corazón manso y rudo,
a igual que esa neblina que inunda la visión,
oculta el níveo gozo de estar contigo
y tiene prisa por un regreso seguro.
Miguel Angel Matamala