Artículo de Adelaida Díaz Gálvez


LOS AMIGOS Y LAS AMISTADES

¿Que son los amigos? eso me pregunto yo muchas veces, y saco en conclusión que los amigos verdaderos son como esas muletas invisibles, que desde la niñez hasta el final nos ayudan y nos animan a seguir caminando para que nunca desfallezcamos. Decía H. Tomas Tuller que el amigo es ese que te socorre y no nos compadece.

En estos tiempos que nos ha tocado vivir, qué pocas personas podemos decir que obtenga el titulo de buen amigo, una vez leí mil amigos es poco y un solo amigo es mucho. Amistades hay muchas pero pocos amigos leales, se pueden contar con los dedos de la mano.

Yo que voy de observadora en todos los temas he comprobado personas que han tenido un tropiezo, lo mismo hombre que mujer. Continuo, ya sea por su trabajo o en la vida social o en dejar su estatus, bien haber sido una persona relevante como se suele decir con mano ... Que tenia coche, pero ya por azares del momento ya no lo tiene y es una persona corriente y normal se queda sin amigos que creyó tener.

Esto ocurre en todos los estamentos. En los grandes empresarios, en los círculos médicos o los abogados , diputados, directores o enfermos casi imposibilitados. Se ven muy solitarios y ven como él creía que eran sus amigos ve como poco a poco le van dando de lado.

Los pobres se sumergen en una profunda depresión que aparte de sus problemas se les añade el dolor del alma que es lo que más duele.

Yo les consolaría con un proverbio francés que dice: el que deja de ser amigo es que no lo ha sido jamás. Teníamos que opinar como Oscar Wilde es indecente, mala, nada puedo decir en su favor pero es mi mejor amiga. Esto es muy cierto debemos aguantar a los amigos con sus defectos y procurar aconsejarles de sus actos pero nunca abandonarlos.

Hay tan buenos amigos que es como para repetir muchas veces. Quien encuentra un buen amigo encuentra un tesoro.

Hay muchas normas para conseguir buenos amigos, lo primero saber escuchar y nunca discutir ni de política ni de religión. No acomplejar a nadie con títulos y sabiduría solo los que saben poco quieren mostrar en todas partes lo que saben. No hablar de propiedades ni de desahogo monetario pues todo esto hace que nos encontremos solos pues no encontraremos quien nos aguante.

Yo aconsejaría y no me gusta aconsejar , pero agradezco que me lo den sea de las más revelantes a las más sencillas personas, todas tienen algo que enseñar.

Yo les diría a los que presumen de saber y de inteligentes que nada es seguro. Que miren a esos personajes que han estado en la cresta de la ola y los pobrecitos se ven sumergidos en la estación del olvido y sin regreso, pues perdieron las ganas de volver.

Y a los que viven en Villa Money Money que con la que esta cayendo nadie saben como acabarán.

Lo que en la vida perdura son las bondades y los buenos amigos, es difícil tener pero no imposible. En una ocasión cuando yo trabajaba vino una supervisora, íbamos por la calle y parece que ese día todo el mundo salió, no paré de decir adiós ola me alegro verte. La supervisora se paró y me dijo: tiene usted la costumbre de decir a todo el mundo adiós. Le contesté un poco indecisa que esto no era Barcelona, aquí todos nos conocemos todos gozamos de muchas amistades. Ella remató: pues yo solo conozco la peseta y el trabajo.

Qué pena me dio. Reconozco que es una vedad como un templo eso de decir que cada vez que miro a mi perro creo menos en los hombres. Qué desengañado y desesperado hay que estar. Desde luego que esos sí que son nobles, yo los quiero porque son tan tiernos y fieles.

Pero debemos tener amigos, amistades, que las hay maravillosas, solo hay que saber elegir y saber sobrellevarnos todos y disfrutar de este don.

Cuanto tendríamos que hablar de esto, nos extenderíamos tanto

Solo tengamos un recuerdo de esas amistades que se ausentaron de este mundo pero no de nuestro recuerdo ni de nuestro corazón.

ADELAIDA DIAZ GALVEZ

a-diaz@hotmail.es