Artículo de Adelaida Díaz Gálvez

MI AMANTE

Le llamo mi fiel amante, me acompaña a todas partes y puedo dar mi opinión sin que nadie mande callar.
Decía Joseph Jumbert: Cierra los ojos y veras y yo a través de las palabras lo veo todo y lo magnifico teniendo exhaustiva información. Me rodeo de todos esos fantásticos amigos, no los veo pero son como parte de mi familia. Para mi hoy por hoy es lo mejor que tengo, por la noche les permito dormir sobre mi almohada, cuantas veces lamento que Morfeo ocupe su lugar.
Mi radio transistor es pequeño, me hace a veces llorar sonreír viajar. Todo el día va conmigo por mi hogar. Algunas veces no se donde lo pongo y movilizo a toda la familia para que lo encuentre. Mis nietos, los niños como son, lo encuentra y me dicen –Toma abuela tu amante.
Y la verdad más grande es como un amante me lleva a todas partes, escucho información de todas clases y en el disco duro de mi mente, acaparo tantas vivencias de este mundo lleno de sorpresas y como Albert Einstein , opino que la imaginación es más importante que el conocimiento.
Escucho opiniones de toda índole. Cuantas veces lamento noticias tan dolorosas como desgracias personales, catástrofes espantosas. Otras me dan tan buenas vibraciones.
Nunca me domina la soledad , tengo tantos amigos que me den tanta compañía, me seduce el matiz de sus voces.
Me llenan de cultura, esos invitados que me hablan de todos los libros de antiguos sucesos, de medicina creedme para mi la radio la valoro mas que el ordenador sin hacer ningún esfuerzo me informo de todo.
Hoy me visto con el traje musical y me coloco en el palco de mi sofá. Me dejo seducir con esas melodías del ayer y las románticas de hoy.
Pienso que es una majadería que en esas entrevistas se les pregunte que se llevaría a una isla desierta. Jamás quisiera estar en una isla desierta , pero me llevaría mi transistor con pilas perpetuas.
Cada vez bendigo más a la electricidad y a las pilas que siendo tan pequeñas me dan tanta felicidad.
Siempre que hago algún regalo suelo regalar un transistor pequeño que no cuesta mucho al principio se quedan un poco indecisas pero días después me dicen: Que bueno que me regalases una radio me tiene enganchada. Decía Fernando Rojas: El placer no comunicado no es placer. Me comenta te lo agradezco de corazón. Soy dichosa y feliz cuando por la noche al irme a descansar , prescindiendo de la caja tonta, y no es que no me gusta que si, pero es tan pesada tan violenta, con esos programas basuras, que la verdad que te evaden de todo y te hacen meditar hay que ver lo que tiene que hacer algunas personas para comer prefiero estar a ramadán.
Pues bien escucho los mejores programas, viajo alrededor del mundo. Para mi seria una tragedia no tener pilas y procuro siempre estar sobrada de ellas.
Si me despierto a media noche me conecto con el y se como va el mundo.
En la mañana al alba escucho la meditación religiosa luego todo el día tengo la mejor información es un placer que apenas cuesta dinero.
Adelaida Díaz Gálvez
a-diaz@hotmail.es